Oaxaca, una región impregnada de historia antigua y vibrante cultura, alberga algunos de los sitios arqueológicos más espectaculares de México. En este artículo, te llevaremos a un viaje a través del tiempo explorando tres tesoros ceremoniales: Mitla, Monte Albán y Yagul, cada uno ofreciendo una perspectiva única sobre las enigmáticas civilizaciones zapotecas y mixtecas.
1. Monte Albán: El Corazón de la Cultura Zapoteca
Situado en las alturas que dominan el Valle de Oaxaca, Monte Albán no es solo un testimonio de la ingeniería zapoteca, sino también un centro ceremonial crucial fundado alrededor del 500 a.C. Al pasear entre sus plazas, pirámides y tumbas, la historia cobra vida bajo tus pies. Destacan el Juego de Pelota y las famosas estelas de los Danzantes, que representan figuras en posturas místicas. La UNESCO reconoció a Monte Albán como Patrimonio de la Humanidad en 1987, consolidando su fama internacional tras el descubrimiento del impresionante tesoro en la Tumba 7 en 1932, donde se encontraron objetos de jade, oro, plata y piedras semipreciosas.
2. Mitla: La Ciudad de los Muertos
En contraste con Monte Albán, Mitla fue un sitio esencialmente religioso y militar. Su nombre proviene de 'Mictlán' en náhuatl o 'Lugar de descanso' en zapoteco, reflejando su función como necrópolis. Famosa por sus intrincados mosaicos de grecas, Mitla ofrece un espectáculo de arquitectura y arte donde cada piedra meticulosamente tallada narra antiguas creencias. Además, Mitla es conocida por sus palenques de mezcal, donde se puede experimentar la tradicional elaboración de esta bebida sagrada, y por sus mercados, que exhiben la rica gastronomía oaxaqueña y artesanía textil local.
3. Yagul: La Fortaleza en la Colina
Yagul, conocido en zapoteco como 'árbol viejo' y menos explorado que los anteriores, floreció tras el declive de Monte Albán. Esta fortaleza ofrece vistas panorámicas del valle y alberga la segunda cancha de Juego de Pelota más grande de Mesoamérica, solo superada por Chichén Itzá. Sus palacios, terrazas y tumbas, como la Tumba 28 adornada con relieves de glifos zapotecos, son testigos silenciosos de la rica historia que aún pervive en sus muros.
Visitar Mitla, Monte Albán y Yagul es embarcarse en una inmersión profunda en la historia y la cultura de Oaxaca. Estos sitios no solo son esenciales para entender el pasado precolombino de la región, sino que también ofrecen una experiencia rica y conmovedora que resuena en el alma y los sentidos.
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